Zelig

y otras rarezas geniales de Woody Allen nos demuestran como se divierte un freak haciendo aportaciones al lenguaje cinematográfico; hoy nos puede parecer aburrido un documental falso sobre un hombre camaleón que pasa a burlarse de política, mundo intelectual, la ley de la prohibición y los bailes y música de cierta época asumiendo el rol de no ser nadie para estar presente en todo...pero debemos aceptar que la forma de manejar la información, las imágenes, la construcción del guión y la voz que conduce esta broma, son realmente espectaculares. Tengo un amigo que dice que nada más de ver la cara de Woody Allen no se le antoja ver nada de lo que ha hecho, y un hermano que se asombra de que la misma persona haya hecho Bananas y Match Point, o Celebrity y Take the money and run, Alice o Manhattan; Annie Hall o Anything else aunque esta sea la misma película versión adolescentes. Que el mismo cineasta haya trabajado con Jason Biggs o Anthony Hopkins, Carla Bruni, Scarlet Johansonn, Diane Keaton, Leonardo Di Caprio, Kennet Branagh (haciendo una estupenda imitación de Woody Allen en Celebrity), Javier Bardem, Sean Penn y un interminable etcétera; así es Zelig tiene mucho de Allen, que con su aparente poca personalidad, o extremada personalidad sabe adaptarse a cualquier elenco, a cualquier historia, a cualquier ciudad; no sólo New York sino también Londres y Barcelona, y poca gente sabrá a ciencia cierta quien es el genio que los hizo reír, o pensar, filosofar, excitarse, llorar, o si; a veces también: aburrirse, sobre todo cuando el cine de Woody es utilizado en clases universitarias de psicología, comunicación y demás.

When the movie is over fade to black